Descubre todo lo que debes saber sobre los préstamos con garantía hipotecaria: qué características y requisitos tienen, qué documentos necesitas presentar al solicitar uno, qué diferencias tiene con una hipoteca al uso...
Los préstamos con garantía hipotecaria son un tipo de financiación en los que las personas que lo solicitan tienen que presentar como aval bien de su propiedad , sin cargas o con muy poca hipoteca pendiente (debe haber pagado, al menos, el 80 % de la misma).
Es decir, para que el banco o la entidad financiera les deje el dinero tienen que hipotecar un bien (puede ser una vivienda, un terreno, obras de arte...) que, en caso de impago, se le podría embargar.
Un crédito con garantía hipotecaria no es lo mismo que un préstamo hipotecario. El primero se suele usar cuando se necesita un importe elevado de dinero como, por ejemplo, para reunificar deudas, parar un proceso de embargo, emprender o poder abonar la aceptación de una herencia. El segundo, una hipoteca, se emplea para comprar una vivienda y la garantía son, además del inmueble, los bienes presentes y futuros del titular.
La primera gran característica de los préstamos con garantía hipotecaria es que, para poder acceder a uno, se debe tener un bien, habitualmente una vivienda, en propiedad y sin cargas o bien con una hipoteca sobre ella pero a punto de amortizar. Más allá, en cuanto a los créditos con garantía como tal, suelen tener estos términos:
Aunque pueden parecer similares, un préstamo hipotecario no es un préstamo con garantía hipotecaria. El primero, también conocido como hipoteca, se suele solicitar para comprar una vivienda, que se usará como primera o segunda residencia. Si los titulares dejaran de pagar las cuotas, el banco o financiera usaría como garantías el propio inmueble y otros bienes que pudieran tener. Para poder acceder a un préstamo hipotecario se debe tener un muy buen perfil crediticio: disponer de ingresos fijos y continuados y no haber aparecido en listados de morosidad.
El segundo caso, un crédito con garantía hipotecaria, la finalidad no tiene por qué ser comprar una vivienda. De hecho, los suelen contratar personas que o bien necesitan importes elevados de dinero y no quieren aportar grandes justificaciones o bien no pueden acceder a un préstamo por otras vías. Así, se acostumbra a pedir tanto para cubrir un gasto imprevisto, liquidar o reunificar deudas pendientes como para poner en marcha un negocio. En muchos casos, pueden acceder a préstamos con garantía hipotecaria personas que están en listados de morosidad.
Un préstamo con garantía hipotecaria puede pedirse para multitud de finalidades. Habitualmente lo suelen solicitar personas que necesitan un importe considerable de dinero de forma más o menos urgentes y no quieren dar muchas explicaciones. Aunque puede haber más motivos para pedir un crédito con garantía, estos son las que más se repiten:
La principal ventaja de un crédito con garantía hipotecaria es que te permite solucionar una necesidad de dinero, ya sea urgente, inesperada o planificada, para que le no se dispone de liquidez.
Más allá, destacamos otros aspectos que se deben valorar:
Los préstamos con garantía hipotecaria, como cualquier tipo de financiación, están destinados a cubrir una necesidad de liquidez. Así, aunque gracias a ellos podamos cumplir con nuestro objetivo, presentan una serie de inconvenientes. Te los explicamos uno a uno:
En España, los préstamos con garantía hipotecaria se solicitan a financieras ya que no suele ser un producto que suelan comercializar los bancos. En otros países encontramos otras vías de acceder a este tipo de financiaciones. Así, podemos encontrar algún tipo de préstamo con garantía hipotecaria entre particulares o línea de crédito con garantía hipotecaria.
Desde CrediMarket te aconsejamos que, antes de elegir cualquier opción, compares en el mercado las condiciones y características y te asegures, sobre todo, de que la entidad a través de la cual vas a contratar tu financiación presenta todas las garantías de fiabilidad y seguridad.
Los requisitos de los préstamos con garantía hipotecaria son menos duros que los de otro tipo de financiaciones. De hecho, es posible incluso que los concedan a personas que aparecen en listados de morosidad. Pero, como sucede en otros tipos de créditos, cada entidad tiene sus propios criterios al respecto.
Estos son las principales condiciones que deben cumplir los solicitantes de un préstamo con garantía hipotecaria:
Cuando se pide un préstamo con garantía hipotecaria se debe seguir un proceso. Te explicamos aquí el paso a paso, el papeleo que deberás llevar a cabo para hacer tu solicitud aunque, recuerda, el procedimiento puede variar en función de la entidad a la que se acuda y se puede alargar hasta dos semanas:
Para que una entidad empiece a estudiar la solicitud de un crédito con garantía hipotecaria, se tienen que presentar algunos documentos. Aunque pueden variar en función de la entidad, estos son los más comunes:
Si estás buscando un crédito con garantía hipotecaria pero te agobia el papeleo, no te apures: desde CrediMarket te podemos ayudar. Simplificaremos todo el proceso para que consigas tu financiación fácil, rápido y online. Para ello, debes entrar en nuestro comparador de préstamos y contestar este sencillo cuestionario:
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