Estando en listas de morosos (como por ejemplo: RAI, ASNEF, Experian, etc.) es difícil que una entidad financiera te preste dinero. Los departamentos de riesgos de los bancos, cajas, financieras... suelen incorporar este criterio como causa de rechazo a la concesión de la operación de manera inexcusable.
Haber dejado de pagar una o varias cuotasde un crédito o préstamo personal o un recibo de cualquier tipo (telefonía, electrodomésticos, un préstamo bancario...), entre otros, es un síntoma suficiente para que las entidades no concedan financiación.
Sin embargo el mercado ha acabado creando soluciones para personas que se encuentran en estas situaciones.